Si estás pasando un mal momento debido a una mala experiencia y te sientes sin fuerza ni seguridad en ti mismo, esta serie de consejos te pueden ayudar a recuperar la autoestima
Cómo recuperar la confianza en ti mismo y afrontar con seguridad los problemas
Si estás pasando un mal momento debido a una mala experiencia y te sientes sin fuerza ni seguridad en ti mismo, esta serie de consejos te pueden ayudar a recuperar la autoestima
Cuando alguien nos hace daño o sufrimos el pesar por un proyecto frustrado, es muy posible que eso repercuta, además de en nuestro bienestar mental, en nuestro nivel de confianza en nosotros mismos. Al fin y al cabo, todos somos vulnerables a los golpes psicológicos que recibimos, tengan fundamento por una mala experiencia o simplemente a raíz de una concatenación de hechos que van mermando nuestra autoestima poco a poco hasta perderla por completo.
Si lo intentamos con todas nuestras fuerzas, pero acabamos fracasando, si sentimos que por más que ponemos de nuestra parte no hay un avance claro en nuestra vida... es muy fácil caer en la desesperación y perder la seguridad que tenemos a la hora de hacer las cosas. Lo bueno es que se puede solucionar a partir de una serie de propuestas que harán que cambiemos el chip para recuperar la autoestima.
"Recorre tu pasado, tus experiencias, tus gustos o 'hobbies' en los que puedas identificar esos puntos fuertes que te hacen sobresalir"
Hay muchas maneras y a lo largo y ancho de la red podemos encontrar consejos para recuperar las fuerzas renovadas. El primer paso será el de reconocernos a nosotros mismos, tanto en lo bueno como en lo malo. El autoconocimiento es esencial para valorar qué se nos da bien, qué podemos aportar a los demás y cuáles son nuestras fortalezas, a la par que dar con las razones por las que a veces terminamos fracasando o vencidos por nuestros propios pensamientos.
Dos objetivos
Lo mejor será comenzar por lo positivo. "Recorre tu pasado, tus experiencias, tus gustos o 'hobbies' en los que puedas identificar esos puntos fuertes que te hacen sobresalir u ofrecer mejores aportaciones a los demás", asegura Ann Howell, psicóloga, quien analizó cómo aumentar la autoestima y publicó un texto al respecto en la 'Harvard Business Review'. En este sentido, debemos "reconocer las fortalezas, en lugar de solo enfocarnos en lo negativo", recalca, en una recopilación de sus consejos publicada en la revista 'Wokii'.
Una vez tenemos pleno autoconocimiento de nuestras debilidades y fortalezas, vendrá el paso más difícil: intentar cambiar nuestra forma de actuar para que todas esas malas experiencias se reviertan. "Se trata de ir buscando retos que te saquen de tu zona de confort y te lleven a la consecución de tus objetivos, para que poco a poco vayas dominando aquellos aspectos que te generan inseguridad", esgrime Howell. Así hasta que esa nueva costumbre se convierta en hábito, es decir, algo que realices sin que te des cuenta o de manera consciente.
En todo ese proceso que describe la psicóloga, lo más importante es rodearse de las personas que nos hacen felices o que realmente nos apoyan. Puede que te sientas un poco solo (sea como causa o consecuencia de esa baja autoestima), pero has de tener en cuenta que ninguno somos islas, por lo que basta con una conversación sincera y honesta con alguien de confianza para coger fuerzas. Además, en el proceso de autoconocimiento siempre es necesario obtener la voz de otra persona ajena, ya que podemos reparar en detalles de nosotros mismos que antes no percibíamos, tanto buenos como malos.
"Habla con alguien que te quiera y respete. Exprésale tu frustración y los detalles de por qué te sientes así"
"La inseguridad se alimenta del estrés y del aislamiento", asegura el escritor Kevin Daum en un artículo publicado en 'Inc'. "Lo más probable es que acabes siendo muy duro contigo mismo, más que con los demás, por lo que deberías darte un respiro. Habla con alguien que te quiera y respete. Exprésale tu frustración y los detalles de por qué te sientes así".
Cada pequeña victoria cuenta. Al estar desanimados o bloqueados en nuestra propia inseguridad, es posible que no sepamos advertir las cosas que hacemos bien. Por ello, presta atención a todo lo que te rodea e intenta sacar la mejor versión de ti mismo en cada situación, aunque te resulte difícil. El humor también es importante, ya que ayuda a relativizar las cosas, pero tampoco caigas en la autoflagelación irónica y cínica: está bien reírse de uno mismo para compadecerse, pero no constantemente, ya que eso es otro de los signos claves de una baja autoestima.
Detalles concretos
En último término, y más allá de estos consejos, también hay que tener en cuenta que se trata de un proceso y no de un fin. La felicidad y la autoestima pueden ir de la mano, pero lo que está claro es que no son un objetivo ni mucho menos, sino una forma o medio de vivir con bienestar y seguridad nuestra vida. Harvard Health también ha reparado en dar con una serie de medidas concretas para que poco a poco, y junto a los otros consejos de mayor y más complejo recorrido, recuperes la confianza perdida en quién eres y en lo que haces.
- Aprende algo nuevo. Esto te hará sentir realmente útil y puede ir desde tocar un nuevo instrumento, desarrollar una habilidad desconocida o recuperar un antiguo 'hobbie'.
- Haz ejercicio planteándote retos. La actividad física fomenta la producción de hormonas anti-estrés, pero no solo eso, sino que a la larga hace que nos sintamos mejor al contar con una mayor capacidad para movernos y realizar tareas sin tanto esfuerzo.
- Cuida tu apariencia. Probablemente, el aspecto físico se vea afectado por esa falta de confianza. ¿Qué tal si pruebas un nuevo estilo de vestir por el que nunca te has decidido? ¿O un nuevo corte de pelo o de maquillaje? En ocasiones, realizar cambios en el exterior puede facilitar que otros cambios se produzcan en el interior.